Cómo decorar una tienda por San Valentín.

Corazones de Deco Woerner fabricados en material acrílico para decorar una tienda para San Valentín.

Hoy quiero empezar con la decoración de unos espacios, a los que no siempre les dedico el tiempo que quisiera, la decoración de tiendas y escaparates.

Decorar el escaparate de una tienda o comercio, es tan importante como para que pueda marcar la decisión de los paseantes a entrar en esa tienda o comercio.

Este espejo con forma de corazón de IKEA, puede ser el adorno perfecto para decorar el interior de una tienda de ropa o de complemtos, por San Valentín.

Pero no debemos olvidar cuidar y decorar igualmente el interior de una tienda. De la decoración interior de una tienda, puede depender la decisión final de compra de ese cliente en potencia que «solo entró para mirar».

El rojo no siempre es el protagonista en la decoración del Día de Los Enamorados. Unos corazones de terciopelo rosa, estos de Deco Woerner, pueden ser la llamada de atención de los clientes en un escaparate de tienda.

Si estos dos espacios, escaparates e interiores de tienda, han de cuidar al máximo la decoración en cualquier momento del año, imaginaos cómo ha de ser ese cuidado en fechas en los que las compras son protagonistas.

Unas guirnaldas con conrazones pueden decorar y adornar de forma eficaz tanto un escaparate como el interior de una tienda. Estas que os muestro están hechas con corazones metalizados y se venden en GloboFiesta.

Una de esas fechas especiales en los que, quien y quien menos hace alguna compra, es el Día de San Valentín.

Para el Día de San Valentín, los escaparates en particular y las tiendas en general, se han de llenar de corazones, de cintas de raso, de grandes lazos, de labios de color rojo, de flores rosas, y de palabras de amor, love, o amour.

Algunas telas que muestren motivos como rosas o corazones, como esta de Filart, pueden ser una forma económica y creativa de decorar una tienda en San Valentín.

En una tienda o comercio, tan importante es decorar de forma atractiva el escaparate que capta la atención del posible comprador, como el interior de esta tienda que puede marcar la diferencia entre el simple visitante que entra «para mirar» y el comprador que llega finalmente a adquirir un producto.