Hay que aclarar porque puede llevar a confusión, que lo que hoy os propongo no es hacer una tarta con sabor a sandía con sandía. La sugerencia es convertir una sandía, una sandía natural, en una tarta. O más bien, hacer que una o varias sandías, parezcan una tarta.
¿Quieres sorprender a tus invitados sirviendo esta fruta de una manera diferente? Pues sirve una sandía como si fuera una tarta. ¿Quieres celebrar un cumpleaños sano? Pues sustituye la típica tarta por una tarta con sandía. ¿Quieres una tarta de postre en una comida al exterior pero el calor la hace imposible? Pues invéntate una tarta de sandía.
Y veis que no parece difícil hacer una tarta con una sandía. Aunque como casi todo, se puede complicar tanto como queramos.
Puedes usar de base una cortada gruesa de sandía y adornarla con bolitas también hechas de sandía, fresas, arándanos , uva o cualquier otra fruta. O puedes cortar y quitarle la corteza a la sandía para hacer la misma u otra decoración.
Y si la idea de la sandía-tarta no te convence ¿por qué no tartaletas de sandía en lugar de una tarta grande? La idea es la misma, utilizar la sandía o la pulpa de la sandía para darle forma de tarta, pero de menor tamaño y decorando y sirviendo individualmente.
Y como ya he dicho, complicarlo podemos complicarlo tanto como queramos. Podemos hacer una tarta con sandía de un solo piso o de varios pisos, adornándolos y decorándolos con más sandía u otras frutas, para conseguir que una sandía natural, parezca una auténtica tarta de celebración.
Esta me la apunto y en cuanto el tiempo se decida de una vez la pruebo
Bsos