Ya sabéis que siempre apuesto por cambiar de sitio las cosas, darle una función diferente a los objetos o colocarlos en espacios inesperados. Yo misma lo he hecho en el dormitorio, en el salón y hasta recuerdo que en el balcón. Y siendo la cocina (junto con el cuarto de baño) uno de los espacios de casa en los que más me gusta arriesgar, no…