No utilices un conducto de aire como centro de mesa.

En serio, creo que esto del reciclaje, de la reutilización y del cambio de función de los objetos, ha de regularse. ¿O qué pensáis de este tubo de aire, convertido en centro de mesa?

Podéis decirme que es una decoración original, y tendré que decir que lo es. Podéis decirme que es una forma barata de llenar la mesa de decoración, y tendré que decir que lo es. Y hasta podéis decirme que todos los invitados a una comida con un tubo de aire como centro de mesa, van a sorprenderse. Y tendré que decir que seguramente comentarán el hecho toda la tarde.

Pero, ¿alguien se atreve a decirme que un tubo de aire con su imagen de “perdonen las molestias estoy de obra”, es una bonita decoración de mesa?

Hace mucho tiempo que no hago un post negativo sobre decoración. Y la verdad es que jamás se me hubiera ocurrido que pudiera hacerlo alguna vez sobre un centro de mesa. Pero es que es un centro de mesa hecho con un conducto de aire.

Lo siento, pero mi gusto personal no admite poner sobre la mesa, y menos con la intención de convertirlo en un elemento de decoración, un tubo de aluminio, por muchas flores que lo adornen.

Esta propuesta, por si alguien siente curiosidad y porque es de ley otorgar el mérito a quien corresponde, lo he encontrado en un artículo de Green Wedding Shoes, que pretende ser inspiración para decorar con un estilo entre rústico e industrial.

Este feo tubo como centro de mesa, no está en realidad pensado para decorar cualquier mesa, sino para decorar una boda.

Que sí, que sí; que a alguien le ha parecido buena idea usar un tubo de aluminio, de esos que se esconden tras falsas paredes, techos de escayola o armarios, y que sirven para echar fuera los malos gases de una vivienda, para decorar una mesa de el día más importante de una vida.

Debo decir que soy una abanderada del reciclaje y que además me encanta cambiarle la función a las cosas y aprovecharlas para algo para lo que no fueron diseñadas. Sin embargo, también creo que hay tener cuidado en eso de “inventarse” decoración desde objetos que no lo son.

Es más, tengo dos claros consejos a la hora de reciclar y decorar. Primero, que si le cambias la función a algo, que sea hacia una función práctica y no únicamente decorativa. Y el segundo, que si quieres reciclar algo para convertirlo en objeto decorativo, que lo hagas de tal manera que apenas se reconozca el objeto original.

¿O qué pensáis? ¿Utilizaríais un tubo de aire de aluminio para decorar una mesa?

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