La fiesta del 4 de julio conmemora la independencia de los Estados Unidos de América. Por eso es una fiesta poco exportable. Pocas son las personas no estadounidenses, fuera de Estados Unidos, que celebran el 4 de julio. Rafa y yo somos de esas pocas personas fuera de USA que festejamos el 4 de julio y este año lo hemos decorado así.
El 4 de julio, Rafa y yo y por ese amor sin sentido que le tenemos a Estados Unidos, celebramos la independencia de Estados Unidos. Nuestra particular fiesta del 4 de julio que celebramos desde hace varios años, es una comida sencilla y simple, pero siempre con hamburguesas, patatas y refresco de cola.
El año pasado se me ocurrió decorar la mesa de nuestra españolizada comida del 4 de julio, con los colores de la bandera de USA; azul, rojo y blanco. Podéis ver o recordar, si ya lo visteis en su momento, cómo decoré el 4 de julio el año pasado.
Como os cuento, este año también he decorado la mesa para comer el 4 de julio. El resultado ha sido muy parecido al del año pasado, sobre todo porque no quiero dejar de «abusar» de los colores que definen la bandera estadounidense y que es símbolo necesario en esta fiesta. Ya que estoy lejos, decorar con azul, rojo y blanco el 4 de julio, es la forma con la que más fácilmente me acerco a un lugar que siento un poquito mío en la distancia.
Un simple mantel de plástico azul al que le he pintado estrellas, ha sido la base de la decoración del 4 de julio este año durante la comida.
De lo que he puesto sobre ese mantel para el pasado 4 de julio, tengo que destacar las estrellas de madera DIY que uso siempre a la hora de comer cada día, pero que en esta ocasión les he dado una imagen más festiva con unos posavasos rojos con forma de estrella y punteados de blanco. Como base de estas estrellas, no puedo dejar de comentar el toque «vaquero» que personalmente tanto me recuerda a la parte de USA que particularmente prefiero; el suroeste.
Para la mesa del 4 de julio de este año, he reutilizado algunos de los elementos decorativos que ya usé el año pasado. Los candelabros de cemento que os enseñé a hacer en este mismo blog, han vuelto a aparecer este ya pasado 4 de julio en la mesa. Y la estrellas de goma EVA que pegué en unos vasos de plástico en el 4 de julio de 2014, este año las he colocado en el borde de unos de cristal como veis en las fotografías.
Una auténtica bandera americana, pues la compramos Rafa y yo en 2011 en Los Angeles, se ha convertido en protagonista de esta comida del 4 de julio en nuestra mesa. Eso, después de desafiar las críticas de Rafa quien aseguraba que la íbamos a manchar, como si fuese casi pecado hacerlo.
Y como no teníamos fuegos artificiales, algo también muy del 4 de julio en Estados Unidos, se me ocurrió cortar unas tiras de papel y colocarlas en unas pajitas para simbolizar esos fuegos artificiales que no faltan en una celebración del Día de la Independencia Americana.
Para comer, lo que ya os he dicho; hamburguesas, patatas fritas (esta vez de bolsa) y refresco de cola.