Adoro las cestas. Me gustan las enormes cestas que permiten almacenar a lo grande y cestas más pequeñas para guardar pequeños objetos. Las que hoy te propongo son cestas pequeñas que además no están hechas del material que esperarías en una cesta. Estas pequeñas cestitas están hechas con serpentina.

Y cuando digo que «están hechas» lo digo con conocimiento porque la que veis arriba, es una cesta de serpentina hecha por mí. Y si te fijas, se ve claramente que es una cesta hecha de serpentina, aunque a primera vista puede no parecerlo. La he logrado utilizando solamente unos pocos rollos de serpentina de colores y algo de pegamento.

Es posible que ya sepas cómo se hacen estas cestas de serpentina porque están apareciendo en muchos sitios. Es posible incluso que ya hayas hecho unas cuantas de estas cestitas de serpentina porque enganchan. Pero por si no las habías visto o por si ya conocías estas cestas de serpentina pero no sabes cómo se hacen, lo primero que debes saber es que tú también puedes hacerlas fácilmente. Aquí va el vídeo tutorial.

CÓMO HACER CESTAS DE SERPENTINA.

Hacer cestas de serpentina es tan fácil como ir enrollando la cinta de serpentina sobre sí misma. Cuantas más cintas enrolles, más grande podrá ser tu cesta.

Puedes enrollar serpentina de un mismo color para conseguir una cesta monocromática que combine con la decoración de tu casa. Pero si quieres una cesta más divertida, te animo a que mezcles colores.

Mientras enrollas, otro truco para que al final no se te desmonte tu cesta de serpentina, es aplicar algo de cola con un pincel sobre la serpentina. También puedes utilizar pegamento en barra pero la cola ofrece mayor elasticidad.

Uses más o menos cola en el proceso de creación de tu cesta de serpentina, cuando sí la vas a tener que aplicar seguro es al final de cada cinta de serpentina. Pega el extremo final a tu rueda de serpentina con la cola y aplica más cola sobre ese mismo extremo para fijar la nueva cinta y seguir enrollando.

Cuando creas que ya tienes suficiente rollo para tu cesta de serpentina, fija el extremo con más cola.

En este punto tu cesta de serpentina se parecerá más a un posavasos supernutrido que a una cesta. Falta darle la forma.

Ve levantando el rollo de serpentina hasta conseguir un ancho y un alto suficiente para que tu cesta parezca una cesta y de la forma que te guste.

Para acabar esta manualidad, y para fijar por completo la forma de estas cestas de serpentina, te recomiendo que aplices cola con un pincel por toda la superficie, por fuera y por dentro. Si lo prefieres y tienes a mano, puedes dar una última capa de barniz a tu cesta para darle brillo y rigidez.

Si lo que estás buscando es hacer una cesta grande para guardar objetos como pañuelos, cámaras de fotos, sombreros, gorras o revistas, no te recomiendo que te pongas a hacer cestas de serpentina. Porque aunque estas cestas, según la serpentina que enrolles, pueden hacerse tan grandes como quieras, el tiempo que vas a tener que dedicar es demasiado para cestas muy grandes.

Estas cestitas de serpentina son perfectas para hacer a pequeña escala. Te sirven pues para guardar pequeños detalles de bisutería, botones que tienes pendientes para coser o incluso si las haces de un tamaño suficiente, puedes utilizarlas como vaciabolsillos.

La cesta de serpentina que veis en el vídeo y en las fotografías es muy pequeña. La he hecho así para poder mostrarla cómodamente, sobre todo en el vídeotutorial.

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