Los volantes en la decoración, han sido relegados a escasas piezas textiles, como cortinas o cubrecamas.

Pero aunque difíciles de usar sin perder el buen gusto, hoy veréis que los volantes son un recurso decorativo para nada rechazable.

Los volantes se crean aplicando telas alargadas y cosidas en frunce, sobre otra tela que hace de base.

Aunque en moda los volantes se han usado, y reaparecen con más o menos fuerza de vez en cuando, los volantes en la decoración se han usado mucho menos.

Pero ¿por qué no aprovechar el volumen de los volantes para decorar un espacio visualmente demasiado plano?

Además de poder usar sin abusar los volantes en los textiles que comunmente se han decorado con volantes, como cubrecamas o cortinas, podemos tener éxito decorando cualquier ropa de hogar con volantes.

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Un cojín puede ganar presencia con volantes fruncidos tanto en los extremos como por toda la superficie.

Y hasta los faldones de un mantel pueden lograr mucha gracia decorados con volantes.