Me he hecho un bol con arcilla blanca. Un bol o dos. En realidad, lo acertado sería decir que me he hecho un bol y un bolito. El segundo, hecho sin intención original, es un bol pequeñito que se me ocurrió hacer tras terminar el grande y viendo que había sobrado arcilla blanca suficiente como para no tirarla.

Juro no estar exagerando al decir que llevo años queriendo hacer un bol de arcilla. Mi primera intención era hacerlo para servir cacahuetes, almendras, pipas… cualesquiera frutos secos en una mesa. Pero aún no se me ha ocurrido con qué cubrir la arcilla blanca para poder servir alimentos sobre ella.

Pero hace unos días, mirando el desastre que frecuentemente se forma en mi escritorio, tomé por fin la decisión de hacer un bol de arcilla. No para alimentos, sino para recoger u ordenar un poco, tarjetas, notas, apuntes, tiques y mi anillo que un día perderé porque siempre acabo quitándomelo cuando escribo en el ordenador.

De esta forma y por esta razón, me he atrevido a enseñaros parte de esa vida real que es la mía y que no siempre es tan ordenada y bonita como sale en las fotos.

Tal y como ya os enseñé en Instagram, lo que hoy os muestro es lo que veo frente a mí mientras escribo posts y posts en el blog. A ese «lo que veo» le he añadido los dos bols de arcilla blanca que he hecho yo misma y como ahora mismo os cuento.

Adoro la arcilla blanca. Es uno de mis materiales favoritos para manualidades. Hace solo unos días, ya os enseñé cómo se le puede sacar partido a la pasta o arcilla blanca, al contaros cómo hacer unas flechas decorativas con ella. Pero ya hace tiempo que llevo haciendo manualidades de arcilla y publicándolas en el blog.

Esta vez y como ya os he dicho, he intentado hacer un bol para dejar pequeños detalles que andan frecuentemente por mi mesa de trabajo. Creo que lo he conseguido y os cuento cómo.

CÓMO HACER UN BOL DE ARCILLA BLANCA

Lo primero que he hecho es despegar un pedazo de arcilla de la pasta que viene en el paquete.

Luego le he dado forma de bola y la he aplanado.

Para conseguir un bol con algo de gracia, me he empeñado en crear algún relieve en su parte exterior. He probado con muchos objetos y al final me he contentado marcando unas hojas y unas lunas, al usar un bote de resina con estos dibujos en relieve. Solo hay que presionar cuando la pasta aún esta húmeda para hacerlo.

Para definir el círculo, he usado un bol de cerámica para cortar la arcilla con esa forma.

Y finalmente, usando ese mismo bol como molde, le he dado la forma al nuevo.

Al secarse, este ha sido el resultado.

PARA QUÉ USO EL BOL DE ARCILLA

Ya os he escrito al comienzo del post, que al final he terminado con dos bols de arcilla DIY. Siempre me da rabia desperdiciar los restos de arcilla blanca cuando termino una manualidad. Como esta vez eran suficiente como para hacer un segundo bol, aunque más pequeño, ahora tengo dos bols de arcilla.

Esperaba que fuera un bol práctico este hecho con arcilla, y lo es, pero debo decir que además queda muy bonito.

Hasta ahora siempre había sobre la mesa y desperdigados por ella, pequeños objetos, tarjetas de clientes y de agencias de comunicación, tiques de compra que quiero revistar y hasta la tarjeta de memoria de la cámara de fotos que siempre olvido devolver a esta.

Ahora sigue estando todo, pero dejarlo sobre el bol me ayuda a conseguir un orden visual en el escritorio que realmente agradezco.

Una de  las cosas más importantes a la hora de trabajar sobre una mesa, es el orden. Muchos lo sabréis porque también trabajáis en el ordenador. Yo he descubierto, porque tuve que renunciar a ello hace tiempo, que no se trata de reducir el número de elementos que dejamos en el escritorio. A veces necesitamos todo eso a mano y no podemos despejar la mesa. Se trata más bien, de mantenerlo todo, pero ordenado.

Además de estantes y estanterías, de cajas y cajones, de archivadores y de otros elementos de escritorio que nos ayudan a mantener el orden, ahora podéis animaros a hacer unos bols como los míos con arcilla blanca, para precisamente mantener el orden con pequeños objetos que van y vienen sobre la mesa escritorio.