Huevos de Pascua, conejos, hierba verde, colores brillantes, flores, divertidas gallinas… ¿a alguien puede no gustarle esta época del año? De todos las figuras o elementos que podemos relacionar con Pascua, los conejos son mi debilidad. Uso conejos como motivos para decorar no solo en Pascua, sino en cualquier otro momento del año, sea primavera, verano, otoño e incluso invierno.
Por eso, cuando me vino a la cabeza la idea de hacer un conejo de Pascua para golosinas reciclando una botella de plástico, idea que recuerdo haber visto pero no recuerdo donde, me puse manos a la obra y en tres días lo he terminado.
No os asustéis que no cuesta tanto hacer este conejo de Pascua para golosinas. He tardado tanto porque me lo he tomado con calma. Un día recorté la botella de agua. Le dí la primera mano de pintura el mismo día pero luego tuve que esperar a que se secara. Cuando se secó no podía darle la segunda mano y se la dí otro día. Finalmente el tercer día, porque tuve que esperar a que secara de nuevo, lo usé para pintarle la carita a este conejo de Pascua.
Si vosotros no queréis esperar tanto, y sobre todo si elegís para pintar el conejo de Pascua portagolosinas el mismo tipo de pintura que yo o pintura plástica, podéis usar un secador de pelo y acelerar el proceso.
Sobre cómo hacer este conejo de Pascua reciclando una botella de agua o cualquier otra botella de plástico similar, ya lo estáis viendo porque no necesita mucha explicación para averiguar cómo se hace. Hay que decir que puede servir para poner golosinas o para cualquier otra cosa que se os ocurra, y que solo se necesita recortar una botella de agua con la forma que veis, pintarla y dibujarle la cara.
Yo he usado una pintura chalk paint para pintar este conejo de Pascua. Concretamente, he usado pintura chalk paint o pintura tiza de color Rosa Capricho de Pinturas La Pajarita. Vale cualquier pintura si queréis que el conejo de Pascua os sirva para decorar solo este año, pero pensad mejor en una pintura o esmalte apropiada para el plástico como la chalk paint, y el conejito dejará a mano dulces, caramelos, bombones, gominolas o golosinas, más de un año.
Hay que advertir de algo con la pintura. Mi primera idea para hacer este conejo de Pascua fue pintarlo por dentro, así no perdería el brillo del plástico y el efecto podía ser curioso. Sin embargo, finalmente pinté el conejo de Pascua portagolosinas por fuera por dos razones. Primero, porque ya que uso chalk paint, quiero que se note que es chalk paint y ese característico efecto de empolvado se iba a perder si pintaba por dentro la botella. Y segundo, es que si pintaba el conejo de Pascua por dentro, las únicas golosinas que podría guardar en él, iban a tener que estar envueltas para que no tuvieran contacto directo con la pintura.
Por lo demás, se pueden hacer no uno, sino tantos conejos de Pascua para caramelos, golosinas, gominolas o dulces como botellas de plástico tengamos para reciclar. Porque si nos gustan las manualidades, es posible que tenemos restos de pintura que nos valen para hacer este conejo de Pascua. Y botellas de plástico vacías y listas para reciclar, es aún más posible que tengamos en casa.
Que original! me gusta mucho, otra idea guardada
Bsos