Cada uno de nosotros tiene su particular vivienda soñada. Personalmente, mi sueño es poder tener algún día una casa con terreno. He escuchado quien quiere acabar viviendo en una apartamento en el Mediterráneo. Y también a quienes están convencidos de que un piso en el centro de Madrid es lo mejor. Pero cuando el sueño son las alturas, no pocos hablan de comprar ático en Barcelona. Hoy hablo de esta última opción.
Barcelona, esa cosmopolita y extremadamente urbanita ciudad, tiene mar. Es posible que por eso sea uno de los lugares donde vivir en un ático, se convierte en sueño. Pero Madrid, Valencia, Sevilla… una vivienda alta en cualquiera de estas capitales puede ser el particular sueño de cualquier amante de las buenas vistas urbanas.
Ocurre en ocasiones, que el sueño de vivir en un ático se vuelve real para acabar descubriendo que sigue siendo maravilloso, pero que no sabemos decorar un espacio con algunas características distintas a las comunes.
El ático, que saber
El ático, no sobra decirlo por si acaso, es por definición el último piso de un edificio. Si hay algún despistado que no lo conocía como tal, entenderá ahora que haya hablado de alturas antes.
Pero en ocasiones, ese último piso ático, es en realidad la misma terraza del edificio, parte de ella o un espacio habitable pero con algunas características arquitectónicas que lo convierten en un espacio singular.
Aunque hoy en día muchos áticos son espacios como he dicho habitables, apartamentos o incluso viviendas exclusivas, originalmente los áticos eran la parte más infame de un edificio. Su dificil accesibilidad, su temperatura fría en invierno y calurosa en verano y frecuentes humedades, no hacían de un ático esa vivienda soñada que hoy es.
Los primeros áticos fueron por lo que he dicho, utilizados com almacenes, aunque poco después como dormitorios extra a los que se accedía por escaleras para la vivienda inferior y en otros casos como oficinas.
La aparición de los ascensores, la moderna posibilidad de controlar la temperatura y aislar del exterior las paredes interiores y quizá la necesidad de los contructores de conseguir ocupar los áticos, ha hecho que estos espacios finalmente, se hayan convertido en viviendas de lujo, apartamentos exclusivos o espacios deseados por su belleza arquitectónica y sus admiradas vistas.
Techos más bajos, espacios diáfanos y sobre todo la presente en la mayoría, terraza, son esas características arquitectónicas interesantes de un ático. Por estas razones, decorar un ático es algo distinto a hacerlo con otro tipo de vivienda.
Cómo decorar un ático
Muebles de mayor tamaño, separaciones visuales o físicas del espacio y sobre todo pensar en convertir esa característica terraza de los áticos en un espacio habitable y útil, son algunas necesidades específicas al valorar su decoración.
La enorme cantidad de luz de un ático y sus vistas, son también cualidades a tener en cuenta al decorarlo. Si su altura es la adecuada para preservar la intimidad, se pueden dejar las ventanas sin cortinas o con elementos de sombreaje que hagan posible descubrirlas por completo en ciertos momentos del día o de la noche.
En definitica, un ático en cualquier urbe es el sueño de muchos. Conseguir que la decoración y equipamiento no echen a perder el sueño es fácil, pero hay que valorar su característica arquitectura, sus cualidades y sus específicas necesidades.
Mi sueño también es un ático
Mi sueño es tener una casa con jardin, porque aunque vivir en un ático, tiene ventajas, nadie te molesta con pisadas y suele tener las mejores vistas, también tiene cosas negativas y es lo que has dicho, veranos calurosos e inviernos frios